Iniciamos el proyecto con la idea de compartir conocimientos sin saber que al final el aprendizaje sería mutuo. El hecho de iniciar un proyecto que involucra a gente de diversas áreas, comunidades, culturas, edades, enriqueció tanto a quienes participaron como voluntarios como a quienes organizábamos los diferentes talleres. Enriquecimiento tanto a nivel profesional como a nivel personal.
Desde febrero de 2018 iniciamos los talleres para ayudar a la familia Castro en el proceso de reconstrucción de su vivienda donde se creó un lazo muy especial con la familia. Las visitas al terreno en donde construimos la casa se volvió un espacio muy significativo para todos los que participamos en el proyecto. Queda el recuerdo de la angustia y caos de aquel 19 de septiembre de 2017, sin embargo un ambiente esperanzador rodea a la familia que al final logrará volver a dormir bajo un techo seguro, lleno de amor y buenas vibras de todos quienes aportaron a este proyecto en comunidad.
Hechos como éste, impulsa a RECOnstruir A MOR a continuar trabajando en conjunto con las comunidades.